¡Hola! Soy Haruki.

Me llamo Haruki y soy japonesa. Vine a España con la intención de quedarme sólo unos años… ¡y ya han pasado más de 15 y me he convertido en madre de 3 niños.

España es un país donde la gente comunica con naturalidad con cualquier persona en la calle. Es también un país de mucho contacto físico. Me gusta sentir que estamos todos conectados y cómo pequeños gestos amables nos hacen sentir mejor. Es un privilegio ver crecer a mis hijos en este entorno.

Japón es un país donde se da mucha importancia a los valores como el respeto hacía los demás y la honestidad. Cuando veo que la gente genuinamente quiere ayudarnos en Japón, me siento orgullosa de haber crecido en esa cultura. Mis hijos todavía me dicen, “Mamá, ¿por qué la gente es tan buena en Japón?” “Mamá, me he portado bien porque los otros niños eran muy buenos y educados.” “Mamá, cuando vaya a Japón, lo primero que quiero hacer es ver a mis amigos”. No es por casualidad.

¿Has pensado alguna vez qué legado quieres dejar a tus hijos? ¿, o qué quieres que recuerden de ti? Yo pienso a menudo en esto, puede que por mi formación como coach de educación sexual. En mi caso son recuerdos bonitos de familia, nuestro amor y apoyo hacía nuestros hijos, nuestros idiomas y cultura, y el esfuerzo que hacemos para crear la vida que queremos vivir.

A través de mi curso he tenido la suerte de conocer a muchos padres valientes y maravillosos. Todos entendían la importancia de iniciar la conversación sobre educación sexual con sus hij@s, pero les daba vértigo- Como a mí hace 4 años. Después de mi curso, muchos me han dicho “Estoy muy content@ de ver que realmente puedo transmitir el conocimiento que necesitan mis hijos en cada etapa de su vida, y puedo hablar de cualquier tema con claridad y cariño. Esto me aporta una gran sensación de libertad. Nunca había pensado que pudiera tener una relación tan buena con mis hijos a través de la educación sexual.” Para mí esto es una parte importante del legado de los padres a sus hij@s.

Me llena de ilusión acompañar a mis clientes en el aprendizaje y ver esta transformación tan bonita en cada uno de ellos. Siento el enorme amor de cada padre/madre hacía sus hijos, y eso es lo que me motiva a darlo todo en cada curso y a crecer más como coach y como persona.

Te explico a continuación sobre mi decisión de ser coach de educación sexual.

¿Por qué he decidido ser coach de educación sexual en la infancia?

Seguro que has vivido en algún momento un acontecimiento que te ha cambiado la vida de forma significativa. Conocer a alguien especial, ir a algún sitio revelador, dar a luz a tu niñ@… Yo viví uno de esos acontecimientos importantes de mi vida unos años antes de ser coach de educación sexual.
Ocurrió cuando mi hija estaba en escuela infantil. Un niño ordenó a varias niñas de su clase bajarse la braguita en el patio del colegio. Algunas obedecieron y otras no. Todos esos niñ@s tenían tan sólo 3 ó 4 años. Mi hija no estuvo implicada pero me impactó mucho.

De ahí me surgieron muchas dudas:

✳️ ¿Qué le habría ocurrido a ella si hubiera estado ahí?
✳️ ¿Debería decirle algo para que tenga cuidado con… ¿con qué exactamente?
✳️ ¿Por qué algunas niñas obedecieron y otras no?
✳️ ¿Por qué el colegio no habló de este incidente con todos los padres y madres?

A medida que mis hijos iban creciendo, mi preocupación aumentaba.

¿La escuela impartirá educación sexual? Y si no es adecuada, ¿tendremos que hacer algo los padres? 😨
Ahora que los niños tienen acceso a internet a una edad temprana, ¿cómo pueden protegerles los padres de la información sobre sexo? 😰 Me dí cuenta luego de que “proteger” no era ni posible ni adecuado…
Me dí cuenta también de que cuando los niños llegan a la pubertad podía ser ya demasiado tarde para tocar todos estos temas… 😵

Intenté durante un tiempo no pensar más en ello, pero en el fondo me angustiaba la idea de que mis hijos se convirtieran en adolescentes y pudiéramos perder la relación de confianza que teníamos.

Como muchas madres, tengo una relación de mucha proximidad con mi hija. Un día, cuando ella iba a cumplir 8 años, me dije “Basta de tanta angustia”. Yo no quería perder esa buena relación cuando mi hija llegara a la adolescencia. Quería protegerla del acoso sexual. Quería mostrarle siempre mi apoyo. Quería escucharla y guiarla de verdad. Para eso, no debía huir más del fantasma de la sexualidad. Era yo la que tenía que crecer. Por eso decidí ser coach de educación sexual.

En 2019 viajé sola a Japón para asistir a un curso intensivo y obtener el certificado de coach de educación sexual. El día en que me marché intenté salir de casa sin hacer ruido, pero los niños se dieron cuenta y todos salieron corriendo a despedirme. Mi hija pequeña tenía apenas 2 años. Me despedí con una sonrisa, pero me dolía el corazón 💦.

Durante el curso, aprendí mucho y descubrí muchas emociones de mi infancia que tenía bien escondidas dentro de mí.
A través de los mensajes de la profesora, recordé momentos preciosos con mis hijos y se me saltaban las lágrimas cuando estaba sola por la noche.
Después de terminar el curso, volví a España con unas ganas inmensas de ver a mi marido y a mis hijos y abrazarles a todos.

Mi aventura como coach de educación sexual empezó con ese viaje, y se ha convertido en mi trabajo desde el 2022. Es realmente gratificante estar cerca de tantas madres, intentar resolver con ellas sus retos y verlas tan cambiadas después de unas sesiones.

También estoy muy agradecida a nivel personal por todos los cambios positivos que he experimentado en mi relación con mis hijos. No lo hubiera conseguido sin aprender cómo comunicar sobre educación sexual en casa.

Soy una madre como tú. No sabía nada sobre cómo hablar de educación sexual con mis hijos. Pero tenía ganas de mejorar por el amor que siento por mis hijos y me dí las herramientas para ello. Si yo he podido cambiar, estoy segura de que tú también puedes.

Me encanta tocar el piano

Siempre me ha gustado la música. Cuando era una bebé de 3 o 4 meses, mi madre descubrió que se me mojaban los ojos cuando oía alguna melodía triste. Toqué el piano hasta los 16, cuando lo dejé para estudiar fuera de Japón. Pero nunca perdí el contacto con la música, y en 2016 me apunté de nuevo a clases de piano junto con mi hija. Entré en el conservatorio de la música en 2018, y en 2023 he terminado el grado profesional con el premio extraordinario. Mis obras favoritas son de Chopin, Rachmaninoff, Beethoven y Albéniz. (Foto: concierto en el Auditorio Nacional de Madrid)

Me encanta viajar

Cogí mi primer avión a los 16 años, y desde entonces, conocer otros países y otras culturas ha sido mi pasión. Cuando era universitaria conocí Europa, Australia y varios países de Asia y de las Américas gracias a viajes, conferencias y prácticas. ¡Mi marido y yo nos conocimos en Costa Rica! Esta foto es de nuestro último viaje a Japón. Me dio mucha alegría viajar con toda mi familia y ver a mis hijos disfrutar de la gente y aprender el idioma y la cultura.

Me encanta invitar la gente a casa

A mi familia y a mí nos gusta cocinar y hablar con nuestros amigos. Para nosotros, invitarles a casa es una forma de conocerles mejor y compartir momentos bonitos. Así han surgido muchos desayunos, brunches, comidas y cenas… a veces incluso un par de días después de dar a luz! Nos gusta mezclar estilos de comida diferentes y dar un toque de color a la mesa con adornos, flores y platos.

Haruki Kaneko

Coach de educación sexual especializada en la infancia. Se formó en Japón y asistió a varios cursos en Europa sobre educación sexual. Imparte charlas y talleres para madres y padres en Europa, los EEUU, Corea del Sur y Japón. Ha colaborado con diversas instituciones educativas a nivel internacional también. Su mayor satisfacción es ver a su alumnado satisfecho de poder compartir temas sobre la vida y el amor con sus hijas e hijos. Madre de 3 hijos, de niña (12), niño (10) y niña (7).